Ser mamá no es fácil y más cuando tus hijos entran en la “etapa de rebeldía” de hacer lo que ellos quieren o esperar más tiempo para decidir si te hará caso o no. Cierto, esto no sólo causa estrés y desesperación en los papás, sino también una alteración en el bienestar emocional de tu hijo. Pero, si pones en práctica algunas técnicas que te ayuden a fomentar hábitos, la vida de tu pequeño y la tuya será más fluida.
Y aquí es donde aparece la primera pregunta: ¿cómo a mi hijo de uno o dos años le voy a inculcar un hábito, es muy pequeño? Sin embargo, es la edad ideal. Por ejemplo, el Harvard Grant Study revela que inculcarle hábitos para ayudar en casa o hacer las cosas por sí mismo, le ayudará a ser más exitoso en un futuro y tener una mejor calidad de vida.
No tengas miedo y mejor haz el primer intento con estas técnicas fáciles y efectivas, descubrirás que harán magia en tu pequeño y su vida será más relajada y feliz.
1.- Dale una responsabilidad al día. Este mismo estudio de Harvard revela que al ayudar en las tareas domésticas del hogar no solo se acostumbrará a hacerlo por sí mismo desde pequeño, sino que adquirirá otros beneficios como tener una mayor autoestima, confiará más en él y entenderá lo que es la responsabilidad.
2.- Acuéstalo a la misma hora siempre (temprano). Es importante que mantengas un horario de actividades del día y respetarlo, como la hora de dormir. Al hacerlo a la misma hora todos los días creas el hábito y será más fácil para tu hijo entenderlo. Cuando menos te des cuenta, él solito pedirá ir a la cama, esto le ayudará a tener una mejor conducta y desarrollo del lenguaje.
3.- Demuéstrale tu cariño con caricias o abrazos. Y no sólo es una muestra de amor, sino le ayudas a equilibrar su estado de ánimo; por ejemplo, al darle un abrazo apretado reduces el estrés o ansiedad en tu hijo y en ti.
4.- Establece límites de una forma respetuosa. Esto quiere decir que lo guíes paso a paso para que el niño entienda las razones de este límite. Explícale por qué se toma esa medida y en qué lo va a ayudar. Los niños pequeños entienden a la perfección y ten por seguro que con el tiempo lo respetarán.
5.- Deja que el tiempo pase. Inculcar hábitos no significa que seas un sargento cuidando que tu hijo haga bien todo de forma rápida. Al contrario, a veces es necesario dejar que el tiempo transcurra sin estrés ni presiones. Vete un día al parque con él, deja a un lado tu celular y exploren juntos sin distracciones, la idea es que se relajen los dos al máximo.
6.- Limita el tiempo que pasan frente a las pantallas, y esto se refiere a la televisión, tablet o celular; para que tus hijos tenga un mejor estado de ánimo, una mayor capacidad cognitiva y una mejor organización de su tiempo.
Cuando tu hijo ya haya establecido las rutinas, te darás cuenta que se sentirá más conectado con el mundo, es decir, entenderá cómo disfrutar su entorno y su bienestar emocional será mejor.